Hércules y la Hydra
El mito relacionado a Escorpio es el
octavo trabajo de Hércules en el que el héroe debe vencer a la Hydra, monstruo
de siete cabezas que vivía en el pantano de Lerna. Cada vez que se le cercenaba una, otras dos
crecían en su lugar y una de las cabezas era inmortal.
Hércules tiene también la ayuda de un
maestro que le dice que se acuerde de la frase: “Ascendemos arrodillándonos,
vencemos cediendo, ganamos renunciando”.
Al llegar al pantano Hércules lleva un
una espada mágica y una antorcha y al acordarse de las palabras del maestro se
arrodilla y puede sacar la Hydra del pantano con lo que esta se debilita al ver
la luz y seguidamente corta las cabezas y las cauteriza con el fuego,
enterrando la inmortal debajo de una gran roca.
Es precisa la estrategia de sacar el
monstruo a la luz y el cauterizar las cabezas para llevar a cabo la empresa.
Es clara en Escorpio esta necesidad de
sacar a la luz, pasar a la conciencia todo lo oscuro para que pierda su fuerza
destructiva. Para acabar con lo que
reproduce instintivamente, lo neurótico, lo patológico es necesario quemarlo en
el fuego de la conciencia.
En Escorpio vemos siempre esta capacidad
intuitiva, representada por el maestro, de conectarse con los dos lados: la
claridad y la oscuridad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario